A partir del año 2010 se creo la obligación general de proteger los datos personales de individuos en posesión de los particulares.
Estas obligaciones derivan concretamente en deberes de los poseedores de datos personales como son, entre otros:
- Obtención del consentimiento del titular (tácito, expreso o por escrito, según el análisis del caso)
- Elaboración y notificación del Aviso de privacidad, de conformidad con los lineamientos;
- Transferencia de datos conforme a la legislación vigente (uno de los puntos de mayor controversia en la materia)
- Adopción de medidas de protección y seguridad (físicas, administrativas y técnicas)
- Determinación de responsables y encargados para cada caso de manejo o tratamiento
- Nombramiento de un gerente o departamento de datos personales.